La mayoría de las personas ya notan la presencia de la Inteligencia artificial en distintos aspectos de su vida. Hasta el momento, ha sido una gran novedad en el área de avances tecnológicos y se ha podido experimentar más con las herramientas ya disponibles en internet y al alcance de todos.
Una de esas herramientas es el comentado ChatGPT, modelo de inteligencia artificial con la capacidad de interactuar con los usuarios a través de texto. Su popularidad se debe a los múltiples usos que se le puede dar. Un chatbot que procesa los datos solicitados y, a través de su algoritmo, tiene la capacidad de dar una respuesta completa. Todo en cuestión de segundos y sobre un sinfín de temas.
Redactar o resumir textos, planificar, crear códigos de programación o fórmulas de Excel, traducir textos, resolver problemas matemáticos, crear contenido o sugerir ideas son solo algunas de las tareas que puede realizar. Gracias a sus funciones, con rápida respuesta y casi precisa, ha generado una explosiva popularidad entre los usuarios de internet: El ChatGPT llegó a un millón de usuarios en solo cinco días, mientras que, por ejemplo, Instagram tardó 2,5 meses, Facebook 10 meses, Twitter 2 años y Netflix 3,5 años.
Junto con su explosiva popularidad también llegan las interrogantes en materia de seguridad sobre el resguardo de datos personales y organizacionales al momento de hacer uso de esta herramienta.
Algunos países han comenzado a prestar atención regulatoria para emitir lineamientos o leyes que impacten en su uso. Lo mismo está pasando con las empresas, en las que algunas ya han decidido regular o prohibir el uso del ChatGPT entre sus internos.
Para algunos, la Inteligencia Artificial sugiere una gran amenaza para la seguridad y el desguardo de la información. Para otros, es una nueva etapa del desarrollo de los avances tecnológicos e innovación. En su momento lo fue el internet y la nube, herramientas que hoy en día son las formas convencionales de trabajar en ciertos rubros.
“El mundo evoluciona a pasos agigantados y con él lo hacen las herramientas que, utilizadas de manera consciente, pueden fomentar la optimización de tiempos y tareas. Es por eso que, educar sobre su uso correcto es clave para que estas tengan un impacto positivo en el mundo del trabajo”, afirma Jorge Gamero, Director de Experis para Sudamérica, una de las marcas de ManpowerGroup Chile, empresa líder en soluciones de capital humano y una de las compañías más Éticas del Mundo, quienes se han comprometido con el uso de nuevas tecnologías para mejorar las fortalezas humanas y descubrir nuevas formas de encontrar un trabajo significativo para más personas.
La empresa, que cuenta con presencia global, ya ha establecido entre sus trabajadores los lineamientos respecto al uso del ChatGPT y otras herramientas con IA.
Ética y seguridad
Principios base, aplicados en todas las compañías, pero enfocados en nuevos canales que incluyan la IA. ManpowerGroup comunicó su convicción de trabajar de la mano con la innovación y productividad, sin dejar de lado los más altos estándares de seguridad, ética y diversidad.
Orientación y recomendaciones de su uso
Para la empresa multinacional, estas nuevas herramientas significan un beneficio para la productividad. Sin embargo, la permisión de estos elementos va de la mano con asesoría para advertir y orientar el uso correcto de estas herramientas y, de esta forma, velar por la seguridad y resguardo sobre el derecho de propiedad intelectual y privacidad de datos, tanto de los individuos, como de la compañía.
Decisiones Laborales
Bajo la misma orientación del uso y consideraciones de estas nuevas formas de trabajar, está el determinar bajo qué contextos se permite utilizar estas novedosas herramientas, según el cargo y funciones de cada persona. Dentro de las consideraciones, ManpowerGroup advierte a sus equipos de trabajo ser cuidadosos para que el uso de IA y ChatGPT no conduzca a procesos de toma de decisiones legales o éticas. Recalcando que, en una situación así, no se consulte a ninguno de estos recursos para orientación en el caso de una necesidad resolutiva.
El desarrollo de nuevos avances tecnológicos, que se traducen en su uso como un instrumento de trabajo, demanda que las empresas transparenten su posición respecto a su utilización dentro de las dinámicas de trabajo de sus equipos.
